TUBARÁ ATLÁNTICO : TUBARA Y SU RIQUEZA TURISTICA

Tranquilidad. Esta es la expresión ideal si se trata de describir el Parque Mirador de Tubará, uno de los múltiples atractivos de este municipio de 17.500 metros cuadrados de extensión, ubicado en el noroccidente del departamento del Atlántico.

Desde este punto, que está a 275 metros sobre el nivel del mar, se puede ndivisar zonas como Bocas de Ceniza y el Océano Atlántico, así como gran parte de la diversidad de accidentes geográficos de la Región.
Por las noches es un espectáculo. Es una zona para disfrutar la brisa, observar las estrellas y escuchar los sonidos de la naturaleza.
“Cuando está oscuro, desde aquí (el mirador) se ven la iluminación del estadio Metropolitano, en los días que juega Junior en Barranquilla y las luces de los aviones que parten del aeropuerto Ernesto Cortissoz”, comenta el historiador y actual coordinador de Cultura Municipal, José Manuel Castro.
El recorrido continúa en el Malecón, denominado así por los pobladores aunque no esté adyacente al mar. Desde este corredor se puede observar gran parte de la zona urbana del pueblo, conocido como “el pesebre natural del Atlántico”.

La ruta puede seguirla llegando al Pozo de San Luis, bautizado así en honor al fráile dominico que evangelizó en la zona entre 1562 y 1565.

Detrás de este pozo —que fue construido con piedra, ladrillo y calicanto, pero que hoy se encuentra seco— hay una interesante historia compartida de generación en generación.
Para concluir su paseo, puede visitar alguna de las playas jurisdicción del municipio, como son Puerto Velero, Playa Tubará, Caño Dulce y Puerto Caimán, donde puede bañarse y degustar un delicioso pescado fresco.
El regreso hacia Barranquilla puede realizarlo tomando la Vía al Mar, actualmente la que se encuentra en mejor estado para llegar al municipio.

Malecón
Inaugurado en 1993, el Parque Mirador de Tubará tuvo su construcción sobre un cementerio indígena de la etnia Mocaná, con el objetivo de preservar las piezas arqueológicas de los ancestros, teniendo en cuenta que estas eran saqueadas por guaqueros. Si decide visitar el municipio, no olvide llegar a lugares como el cementerio municipal, que funciona desde 1819, y la iglesia San José de Tubará, en la que actualmente la Gobernación del Atlántico ejecuta trabajos de restauración, con el apoyo del alcalde del municipio, Tom Coll.